Diversidad, sí pero no tanta. La inmigración una bonita cabeza de turco.
En este último pleno tuvimos la oportunidad de ver como a Miguel Sanz le traicionaba el subconsciente. Defendía el Presidente vehementemente a la Consejera de Salud y su gestión, y ¡claro! hay que entender que ante la falta de argumentos para esta defensa hay que recurrir a lo que haga falta. En su intento de explicar el déficit del Departamento de Salud nos preguntó si nos olvidábamos del 11% de población inmigrante que hay que atender, yo personalmente no me olvido ni de ese 11% ni del 89% restante.
Me crea muchas dudas su pregunta, acaso ¿ se olvida él del 89% que no es inmigrante?, ¿se olvidará del 50,2% de mujeres?, ¿del 18% de menores?, ¿del 15% de mayores de 65 años que hay en Navarra? Todas estas personas que yo recuerde también tienen derecho a la asistencia sanitaria. Me surge esta serie de preguntas y muchas más porque “curiosamente” no mencionó ningún otro porcentaje, tampoco habló de cuántas de esas personas están cotizando. Muchos datos se le olvidaron en esta desafortunada alusión a la inmigración.
No fue por desgracia la única manifestación de este tipo que tuvimos en el pleno, el Consejero Roig del Departamento de Innovación, Empresa y Empleo a la mañana también recurrió a la inmigración como uno de los factores que aumentaban el paro en la zona sur de Navarra. Si esas personas de las que habla el señor Roig en vez de ser de otro país hubieran nacido en Navarra, en Castilla, en Andalucía ¿el problema sería menor?
No dejan de sorprenderme, sólo me falta escuchar que las cifras de paro mejorarían mucho si las mujeres se fuesen a sus casas a cuidar de las familias y las personas inmigrantes cada cual a su país. Sin duda algunas cifras serían mejores pero actuemos con seriedad, la economía no mejorará sólo con cerrar los ojos y no contabilizar en nuestras listas de paro a quien no nos conviene en estos momentos, lo que necesitamos es que se cree empleo no que se vayan las personas en paro.
Una de las medidas que se proponen en el plan para la integración social de la población inmigrante es la necesidad de generar actitudes positivas en la población de acogida y mucho me temo que este modo no es el más adecuado.
En la promoción de Navarra utilizan a menudo el eslogan de “Navarra, tierra de diversidad”, pero a la vista de este tipo de declaraciones yo diría que piensan algo así como: ¿Diversidad? Sí, pero la “nuestra”, sí, pero la que yo quiero, en resumidas cuentas diversidad sí, pero no tanta. Una muestra más de que aunque proclaman la diversidad prefieren la homogeneidad, homogeneidad en la que dicho de paso no tenemos lugar muchas navarras y navarros.
No sé si sencillamente han sido dos lapsus, dos en un día, o es que realmente este Gobierno va a adoptar el discurso fácil de culpar a la inmigración de todos los problemas de Navarra, son tantos que dudo que puedan con todos ellos, bueno algunos de los problemas seguirán siendo culpa de los euskaldunes ;-)
Se me viene a la cabeza el refrán que dice “Cuando veas las barbas de tu vecino cortar pon las tuyas a remojar” y es que hace tiempo que esta parlamentaria viene mostrando preocupación por el efecto que puede tener la crisis en la integración con la población inmigrante y las políticas de los países cercanos, de hecho en varías ocasiones he planteado en la Cámara la necesidad de prevenir posibles actitudes racistas pues... creo que ya es hora de que nos pongamos manos a la obra para que la inmigración no se convierta en una bonita cabeza de turco.
Junio 2010
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